En Terapia de pareja, Terapia individual

 Sant Jordi Me recuerda… ¡HAGAMOS EL AMOR!

“Cuenta la leyenda que existía un Dragón que atemorizada a toda una población de la comarca. El Rey, con tal de conseguir que el dragón dejara de atormentarlos, decidió ofrecer cada día una persona para que éste no pasara hambre.  La suerte quiso que el primer sacrificio fuera la princesa. Con toda su pena, el Rey envió a su hija a la cueva del Dragón.  De golpe, apareció un joven caballero que matando al Dragón, liberó a la princesa y al pueblo de su terrible desdicha. Al cabo de unos días, allí donde el caballero había matado al dragón, nació un rosal de flores rojas, como la sangre del dragón vencido. (Sant Jordi)”

De la leyenda de Sant Jordi nació una de las más conocidas tradiciones en Catalunya y que además, hoy día se extiende por toda España (día del libro). Las calles se llenan de hermosas flores y de innumerables expositores de libros. ¿El objetivo? Una Rosa y/o un libro para la persona que amas. Podría recomendaros para éstos días una lista de libros interesantes y útiles (sobre todo para estos días confinamiento), pero la verdad, de eso ya estamos saturados. A mi me parece más interesante y provechoso hablar del amor (también y sobretodo ahora en pleno confinamiento algunas veces cerca y otras lejos de las personas a las que queremos).

Y es que podemos regalar muchas rosas y muchos libros, muchos te quieros, piropos, promesas, pero ¿Eso es amar? ¿Cuándo amamos realmente? ¿Cómo amamos cuando lo hacemos?

Conviene que nos hagamos estas preguntas, pues como bien dice Erich Fromm, amar no es un acto pasivo, amar es una conducta, es algo activo, una voluntad. El amor es algo que se hace. (¡Hacer el amor!) Por lo tanto, es algo de lo que nos debemos responsabilizar.

Si el amor es algo que hacemos y damos… ¿Qué componentes son estos que damos?  Toma nota:

CUIDADO:

El amor es la preocupación activa por la vida y el crecimiento de aquello que queremos.

RESPONSABILIDAD:

Hoy en día el termino responsabilidad de usa en el sentido de deber, de alguna cosa impuesta des de fuera. La responsabilidad es, por el contrario, en su sentido verdadero un acto totalmente voluntario, es mi respuesta delante de las necesidades expresadas o no de otro ser humano. Ser “responsable” significa ser capaz de “responder” y estar dispuesto a hacerlo.

RESPETO:

La responsabilidad podría degenerar fácilmente en dominio y posesión si no interviniera otro elemento: Respeto. Respetar significa preocuparse porque la otra persona crezca y se desarrolle según su personalidad. El respeto solo existe solamente sobre la base de la libertad.

CONOCIMIENTO:

No es posible respetar a una persona si no la conozco. El cuidado y la responsabilidad serian ciegas si no fueran guiadas por el conocimiento. Hay muchos niveles de conocimiento. El que constituyo un aspecto del amor no se detiene en la periferia. Esto sólo es posible cuando puedo ir más allá de mi preocupación y ver a la otra persona en sus rasgos peculiares. (p.e. puedo conocer que una persona está enfadada incluso aunque no me lo diga, pero entonces puedo ir más allá y ver que está asustada, inquieta que se siente sola o culpable).

 

En época de confinamiento…

¡Que tengáis un buen día y que hagáis mucho el amor!

 

Bibiana