En Terapia individual

Para poder aumentar nuestra autoestima, primero, es muy importante, poder definirla. Pues, la autoestima, es el concepto que tenemos de nuestro propio valor; es decir, el concepto que tenemos de nuestros sentimientos, pensamientos, sensaciones y experiencias.

Ésta se divide en cuatro pilares fundamentales:

  1. Autoconcepto: quienes somos (¿Cómo nos definimos?).
  2. Autoimagen: como nos vemos (¿Tenemos una autoimagen más positiva o negativa de nosotros mismos/as?).
  3. Autorrefuerzo: como nos reforzamos (¿Nos reforzamos positiva o negativamente?).
  4. Autoeficacia: como de eficaces nos sentimos (¿Nos proponemos retos, nos desafiamos, etc.?)

A continuación os propongo una serie de ejercicios que os pueden ayudar a aumentar vuestra autoestima.

1. REFLEXIONA

Siéntate, conócete y plantéate estas preguntas. Si te es de ayuda puedes redactar todos los ejercicios en una misma libreta para tenerlos más presentes. 

  • ¿Qué es lo que piensas de ti mismo/a?
  • ¿Cómo te sientes contigo mismo/a?
  • ¿Cómo te gustaría ser?
  • ¿Cómo te gustaría sentirte?

2. ELABORA TU TABLA DE AUTOCONCEPTO

Reflexiona y rellena cada uno de los siguientes campos en una tabla.

  • Físico: ¿Qué me gusta y no me gusta de mi cuerpo?
  • Psicológico: ¿Qué me gusta y no me gusta de mi a nivel psicológico?
  • Habilidades: ¿Qué se me da bien y que no se me da bien?
  • Éxitos y fracasos: ¿En qué he tenido éxito y en qué he fracasado?

3. TRABAJA TUS VALORES

Es importante ser consciente de tus valores principales para poder actuar acorde a ellos y sentirte más fiel a ti mismo/a en las decisiones que tomes en tu día a día.

Para ello deberás escoger 5 valores que te definan de la siguiente lista. También, puedes buscarlos por internet ya que existen una infinidad de estos. Además, si quieres, puedes escoger un valor principal.

Listado de valores: honestidad, tolerancia, libertad, compasión, equidad, comprensión, prudencia, gratitud, respeto, responsabilidad, lealtad, armonía, ambición, coraje, perseverancia, solidaridad, superación, laboriosidad, fidelidad, generosidad, honor, honradez, fortaleza, empatía, cortesía, colaboración, etc.

4. REDACTA UN LISTADO DE AUTOAFIRMACIONES POSITIVAS

Redacta frases que te animen y ponlas en algún sitio que veas diariamente. Así, cuando tengas un mal día, puedes releerlas y ver si generan algún impacto o diferencia en tu estado de ánimo o si aumentan tu autoestima. 

Éstas pueden ser frases del tipo “Yo puedo con esto”, “Lo he superado y lo superare”, etc. Es importante encontrar una frase que te resuene y funcione a ti ya que cada persona es única.

5. PREGUNTA A LOS DE TU ALREDEDOR

A veces, es necesario darse cuenta de todos aquellos que nos rodean y tienen una visión diferente de nosotros mismos/as. Por ello, un ejercicio a proponerte, podría ser preguntarles  a otros características positivas nuestras (pueden ser tanto de personalidad como físicas). 

Una vez hayamos recogido todas estas características es interesante ver aquellas que se repiten, ya que probablemente sean aquellas las que poseemos verdaderamente.

En conclusión, la autoestima es algo que conlleva un trabajo diario y va fluctuando a lo largo de nuestra vida. Por ello, es importante trabajarla a través de ejercicios, técnicas, libros o yendo a terapia.

Mariona Esteve i Raventós

Psicóloga General Sanitaria 

Colegiada 29088