La productividad está de moda. Parece que tengamos que estar siempre ocupados, no solo haciendo una tarea, sino diversas al mismo tiempo. Cómo si nunca estuviéramos siendo bastante útiles. Todos pensamos que somos capaces de hacerlo, porque tenemos la sensación que lo hacemos continuamente, por ejemplo, cuando respondemos un email mientras hablamos por teléfono con alguien, cuando comemos mientras escribimos un informe, o cuando tenemos un infinito número de pestañas abiertas al ordenador y vamos saltando de la una a la otra. Pero, no te engañes. ¡La multitarea no existe!
¿Qué pasa realmente?
La ciencia nos dice que solo un porcentaje muy pequeño de la población es realmente capaz de hacer dos cosas al mismo tiempo, puesto que lo más habitual es que nuestro cerebro esté pasando de una tarea a la otra continuamente. Esto implica que, en realidad, perdemos tiempo en el “salto” de una actividad a otra, porque nuestra capacidad de atención necesita cada vez unos segundos para cambiar el foco.
Por lo tanto, la multitarea esconde una trampa: no estamos haciendo muchas cosas a la vez, sino que estamos cambiando nuestro foco de atención muchas veces en poco tiempo. Y, ¡sorpresa!, al final tendemos a ser menos productivos y a cometer más errores que si nos concentráramos en una sola cosa en cada momento.
Entonces, ¿qué tendríamos que hacer para ser más productivos?
Aunque pueda parecer poco intuitivo, el más eficaz es centrarnos en una tarea cada vez, por muy sencilla y aburrida que sea, ¡y por mucho que podamos sentir que estamos perdiendo el tiempo! De este modo, no solo seremos más rápidos, sino que también reduciremos el número de errores y, como consecuencia, seremos más efectivos y productivos.
Sabemos que, en el contexto actual, lleno de estímulos y distracciones, es muy difícil conseguir esta focalización. Así que, si necesitas ayuda para mejorar este aspecto, ¡no dudes en consultarnos!
Iris Ramon Torres
Neuropsicóloga (colegiada núm. 26206)